Prestar atención a la postura puede ayudarlo a verse y sentirse mejor.

La postura es la forma en que sostiene su cuerpo mientras está de pie, sentado o realizando tareas como levantar, doblar, jalar o estirar. Si su postura es buena, los huesos de la columna, las vértebras, están correctamente alineados.

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Los síntomas pueden incluir:

• Hombros redondeados

• Barriga

• Rodillas dobladas al estar de pie o caminar.

• Cabeza que se inclina hacia adelante o hacia atrás

• Dolor de espalda

• Dolores corporales

• Fatiga muscular

• Dolor de cabeza.

 

 

Dos tipos de fibras musculares

El músculo esquelético se compone de dos tipos de fibra muscular: estática (a menudo denominada "contracción lenta") y fásica (a menudo denominada "contracción rápida"). Generalmente, las fibras musculares estáticas se encuentran en las capas musculares más profundas. Nos ayudan a mantener la postura sin demasiado esfuerzo y contribuyen al equilibrio al "percibir" nuestra posición y transmitir esta información al cerebro. Las fibras musculares fásicas se utilizan para el movimiento y la actividad.
Las fibras estáticas queman energía lentamente y pueden seguir funcionando durante mucho tiempo sin cansarse. Sin embargo, las fibras fásicas se agotan rápidamente. Una mala postura provoca fatiga muscular porque recurre a las fibras fásicas en lugar de a las fibras estáticas para mantener la posición del cuerpo.

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Fuerza muscular y longitud

Con el tiempo, la mala postura que exige el apoyo de las fibras fásicas hace que los músculos de apoyo más profundos se desgasten por falta de uso. Los músculos débiles que no se usan tienden a tensarse y este acortamiento de la longitud muscular puede compactar los huesos de la columna vertebral (vértebras) y empeorar la postura.

Retroalimentación del sistema nervioso sobre la posición del cuerpo en el espacio

Las capas más profundas del músculo se ocupan de 'detectar' nuestra posición en el espacio y transmitir esta información al cerebro. Si esta función es asumida por músculos que contienen principalmente fibras fásicas, el cerebro obtiene una imagen incompleta. El cerebro asume que el cuerpo necesita apoyo para contrarrestar los efectos de la gravedad, por lo que desencadena una mayor contracción muscular. Esto se suma al cansancio general y al dolor que siente la persona con mala postura.

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Escucha tu cuerpo

Una buena postura se siente sin esfuerzo, por lo que las sugerencias tradicionales de "buena postura", como echar los hombros hacia atrás y sacar el pecho, también pueden resultar incómodas. En cambio, escucha a tu cuerpo. Haga ajustes menores mientras está de pie y sentado. ¿Qué posición se siente más fácil y elegante?

En la mayoría de los casos, concentrarse en otras tareas (como el trabajo) puede desviar la atención de cualquier sensación de incomodidad física. Adquiera el hábito de sintonizar regularmente con su cuerpo. Si siente tensión muscular o fatiga, muévase a otra posición.